
La reforma energética promovida por el expresidente Andrés Manuel López Obrador, respaldada por el Congreso y firmada por Claudia Sheinbaum, fue publicada en el Diario Oficial de la Federación (DOF) y entrará en vigor el próximo 1 de noviembre. Esta modificación deja atrás la reforma del sector aprobada en 2013 durante la administración de Enrique Peña Nieto.
Con esta reforma, Petróleos Mexicanos (Pemex) y la Comisión Federal de Electricidad (CFE) vuelven a ser consideradas “empresas públicas del Estado” en lugar de “empresas productivas del Estado”. Este cambio subraya un enfoque social en lugar de rentabilidad financiera para ambas instituciones, con el objetivo de ofrecer servicios públicos en el sector energético.
Según la exposición de motivos, este cambio responde a los problemas financieros y de deuda que enfrentan Pemex y CFE, buscando restablecer su rol social. Fernando Zendejas, académico de la Facultad de Derecho de la UNAM, señaló que la reforma representa un cambio de enfoque en las funciones de ambas empresas, con prioridad en el servicio público.
Esta reforma es también una revisión de la Ley de la Industria Eléctrica aprobada en 2021, que había sido anulada por la Suprema Corte de Justicia de la Nación al contradecir la Constitución.
CFE: Líder en el Mercado Eléctrico frente a Iniciativa Privada
La nueva reforma energética establece que la Comisión Federal de Electricidad (CFE) será preponderante en el mercado eléctrico de México, asegurando que ninguna empresa privada prevalezca sobre la empresa pública del Estado. Este rol central de la CFE responde a su misión de garantizar la accesibilidad y continuidad del servicio eléctrico bajo una responsabilidad social prioritaria.
Con este cambio, Morena propone que la CFE genere el 54% de la electricidad en el país, mientras que el 46% restante se destinará a empresas privadas, lo cual será formalizado en una ley secundaria. La reforma modifica los artículos 25, 27 y 28 de la Constitución y revierte ciertas disposiciones de la reforma de 2013 impulsada por el expresidente Enrique Peña Nieto, continuando el proyecto del expresidente Andrés Manuel López Obrador para reforzar el control estatal sobre el sector eléctrico.
Anulan Transitorios de la Reforma Energética de Peña Nieto
La nueva reforma energética, publicada en el Diario Oficial de la Federación (DOF), establece la derogación de todos los artículos transitorios de la reforma de 2013 impulsada durante el sexenio de Enrique Peña Nieto. Esta medida afecta disposiciones sobre rondas petroleras, subastas eléctricas, y la remoción de funcionarios de la Comisión Nacional de Hidrocarburos y la Comisión Reguladora de Energía, así como las reglas del Fondo Mexicano del Petróleo.
Según el académico Fernando Zedejas, esta derogación se realizó de manera preventiva, con el fin de limitar los recursos de amparo que pudieran bloquear la aplicación de la nueva reforma. Con los transitorios eliminados, ya no existirían fundamentos legales para reclamar violaciones constitucionales en procesos judiciales.
La reforma energética actual modifica los artículos 25, 27 y 28 de la Constitución, abarcando el manejo de áreas y empresas estratégicas.