
Felipe Calderón Hinojosa, expresidente de México, se pronunció sobre la sentencia de 38 años de prisión impuesta a Genaro García Luna por un tribunal de Estados Unidos, afirmando que nunca tuvo evidencia que lo involucrara en actividades ilícitas durante su mandato.
Calderón aseguró en la red social X: “Nunca tuve evidencia verificable que lo vinculara con actividades ilegales, ni recibí información de agencias de inteligencia nacionales o extranjeras que trabajaban e interactuaban con él”.
El exmandatario destacó que respeta la decisión de los tribunales estadounidenses, enfatizando su postura como “hombre de leyes”. Subrayó que quien infringe la ley debe asumir las consecuencias de sus actos.
Sentencia y palabras finales de García Luna
El 16 de octubre, el juez Brian Cogan dictó la sentencia de 38 años de cárcel, además de una multa de dos millones de dólares, por cinco cargos relacionados con narcotráfico. Durante la audiencia, al exsecretario de Seguridad Pública se le permitió leer unas últimas palabras en español, donde reiteró ser víctima de una conspiración del gobierno mexicano.
García Luna también mencionó en su declaración que dos de sus hermanos fueron detenidos por las autoridades mexicanas, lo que atribuyó a represalias en su contra.
Calderón respalda su política de seguridad
Calderón defendió la estrategia de seguridad que implementó durante su administración, afirmando que fue una decisión difícil, pero necesaria. “Enfrentar al crimen organizado fue una de las decisiones más difíciles de mi vida, pero lo volvería a hacer porque es lo correcto“, expresó.
El expresidente destacó que su estrategia logró frenar el avance del crimen organizado y que, al finalizar su gobierno en 2012, “el Estado avanzaba, y el crimen organizado retrocedía”. Reconoció que su administración tuvo aciertos y errores, pero defendió el trabajo de las personas involucradas en la lucha por la seguridad del país.
Reflexión sobre el futuro de la seguridad en México
Calderón afirmó que, tras 12 años de haber dejado el cargo, corresponde a la sociedad evaluar su legado y compararlo con los gobiernos posteriores. Además, envió un mensaje al gobierno de la presidenta Claudia Sheinbaum, sugiriendo que tiene una oportunidad para convocar a una política de Estado eficaz que una los esfuerzos para combatir al crimen organizado.
“Más allá de la polarización política, es necesario sumar esfuerzos para enfrentar al verdadero enemigo de México”, concluyó Calderón.